1) En el trabajo, despedir a alguien es serio. Pero sorprendentemente, muchas veces no se explica bien el motivo. Cuando no se aporta una razón clara, es decir, bien motivada, la empresa puede verse en la tesitura de tener que readmitir al trabajador.
Cuando se despide a un trabajador, en el 80% de los casos no se justifica debidamente.
Imaginemos el caso de un trabajador que roba y en su carta de despido solo se pone que se le echa por robar en el trabajo. Esta carta carece de motivación suficiente ya que lo oportuno sería decir qué robó, cuándo lo robó, de qué manera, cuánto vale lo que robó y todo lo que podamos añadir, de manera que, si se entra en disputa, el empleador tenga la seguridad de haber motivado la carta suficientemente para que esta sea efectiva.
En resumen, explicar los despidos no solo es justo, sino que también previene dolores de cabeza legales y futuros malentendidos.
2) En tu primer día de trabajo, es importante que te enseñen sobre los peligros que podrías enfrentar en tu puesto. Esto te ayuda a evitar accidentes y trabajar de forma segura. También es clave conocer tus derechos y responsabilidades en cuanto a seguridad en el trabajo y también los planes de evacuación. Así, puedes tomar medidas para protegerte y hacer tu trabajo de manera más segura. En resumen, recibir esta información al principio no solo cuida de tu salud, sino que también hace que el ambiente de trabajo sea más seguro y agradable para todos. Esto da cumplimiento a los art. 18 y 19 de la Ley de Prevención de Riesgos Laborales en España.
No hay comentarios:
Publicar un comentario